Hace más 4 años llegaste, y no sabía si podría mantenerte siendo estudiante, y aún así en el momento que te vi en la veterinaria tan peluda e indefensa sabía que podía, y te fuiste conmigo, nos dimos tanto amor en el tiempo juntos que no podíamos estar separados, pero luego el momento de crecer para mi llegó y tuve que irme a aprender de lo que es la vida laboral y al mismo tiempo, como el agua en el frío que se congela, pasaba lo inevitable porque tu tan «mi Pet» y yo tan humano, el tiempo y la vida en la calle cobraron factura en tu pequeño cuerpo, y lo más extraño para mí, que eso que para mí era tu mayor virtud, no era bueno y es que tu corazón era más grande de lo normal, eso era un problema decían, pero que crees hermosa no importó yo trabajaba y nunca dude en darte todo con el hecho de tu vivir tranquila, y aún así está vida siendo tan injusta con tu gran problema ser un perro y que el tiempo en ti es tan rápido que se sienten meses a tu lado, pero al mismo tiempo nos entendimos como años de amarnos. Bien dicen que ustedes son un ángel de compañía pero tienen un gran defecto se van tan pronto y dejan muchos corazones rotos… Pero solo denota tu gran cualidad ganar el amor de todos en casa sin decir una palabra y sin dar nada material, solo hacer lo que se tiene que hacer demostrar el amor que hay en lo que fue lo que te mató, tu gran corazón.
Adiós «mi pet, mi cortana, mi cortina, mi gordita, dueña de mi dinero».